PME Masters Certificate

Siiiiiiiiiiiiiiii!!! Esss miiiiiooo, mi tessssoroooo....
Pues sí, después de once días estresantes, lo he conseguido.
Me fuí a Enfield, un pueblo cerquita de Londres para realizar los tres módulos de que consta el curso.
Aviso:
la entrada es más larga de lo habitual, pero es que no he podido resumirla más, son muchas fotos que enseñar y muchas cosas que contar :)

Módulo de pasta de azúcar:
Empezamos haciendo una tarta para ir añadiéndole cosas progresivamente, hechas con diferentes técnicas, vamos, una tarta con de todo...

Fiesta de Halloween

Hoy 31 de Octubre habrá un montón de fiestas de Halloween, y una de esas fiestas va a tener estas galletas y cupcakes.

 

Los cupcakes son de chocolate rellenos de fruta del bosque y con crema de naranja.

 

¿¿¿¡¡¡Naranja!!!???
Vale, ese color no es naranja (es lila, aunque en la dichosa foto no lo parezca), pero es que me permití una pequeña licencia en cuanto al color de la crema.

 

 

Las galletas son de limón, y como no podía ser de otra forma, hay calabazas:

 

y "monstruitos":

 

Estos últimos los ví en este post de Sugarbelle y me encantaron.
Espero que a los "fiesteros" y a vosotros también os guste.

 

P.D. que no os asusten mucho esta noche :P













 

Tarta Maiden

Hacer esta tarta ha sido un auténtico placer.
Había que combinar la celebración de un 40 cumpleaños con un toque heavy.

 

 

Las razones por las que he disfrutado tanto  son simples:

 

- La destinataria es un encanto

 

- Me encantan las rosas

 

- Me encantan las calaveras

 

 

Y aunque por fuera era tan rockera por dentro era de bizcocho de limón, aromatizado con jarabe de limón verde, y crema de limón.
Dulce y ácido, combinación perfecta, igual que la fiesta.

Y para despedirme os dejo disfrutando con este "temita" de Iron Maiden.



Lujuria

En esta entrada os traigo una tarta que me han encargado y que yo la describiría como lujuriosa...
¿Por qué?

Ha sido para celebrar un 70 cumpleaños y me pidieron una tarta de chocolate, clásica, elegante y que no fuera de fondant.
Para mí la tarta reina que reúne las tres características que me dijeron es la tarta Sacher, así que eso hice.
De bizcocho de chocolate amargo (receta de una abuela austriaca de verdad...), rellena de mermelada de albaricoque y trocitos de orejones macerados en ron añejo y también una capa de ganache de chocolate amargo (esto no lo tiene la Sacher pero yo me permití una pequeña licencia).
Para cubrirla le hice un baño de cacao puro que le dio un brillo de espejo y también hice unas placas de chocolate con un efecto mármol, y unas espirales de chocolate blanco y negro.
El resultado fue lujurioso, no se me ocurre una palabra mejor para tanto chocolate y tan bueno.

Espero que os guste :)





Una rosa es una rosa

Es el título de una canción estupenda del grupo Mecano y además es muy apropiado para la entrada que os traigo.

Este pequeño ramo lo he hecho con pasta de goma.
La pasta de goma es fondant al que se añade goma tragacanto, que hace que se endurezca un poco más y permite estirarlo muy fino y que no pierda la forma.

 

Por eso esta pasta se usa para hacer flores, pues así se pueden formar pétalos muy finos para que dé la sensación de una flor de verdad.
Lo único que hay que tener en cuenta es que debemos trabajar rápido para que no se nos seque antes de tiempo y no le podamos dar forma.

 

Normalmente para estos menesteres uso la pasta de flores de Squires kitchen, que para mí es la mejor, pero en esta ocasión he usado pasta de goma de Satin Ice (sí sí, le he sido infiel a los británicos para irme con los americanos...), y la verdad es que me ha sorprendido para bien; se amasa perfectamente y endurece muy bien también, y la relación calidad-precio es buena (es algo más barata que la británica y eso en estos tiempos es algo a tener muy en cuenta). De todas formas quiero que conste que mi favorita sigue siendo la otra, pero esta ocupa un segundo lugar muy bueno en mi corazón...

 

Bueno, pues después de esta disertación sobre las pastas de goma, espero que el ramo os haya gustado :)









Sable Bretón

¿Y eso qué es?

 

 



Pues es una masa sable (quebrada) pero un poco más esponjosa, sin dejar de ser una galleta.
Como está muy bueno y es muy fácil de hacer os pongo la receta.
Ingredientes:
   150 g de mantequilla a temperatura ambiente
   150 g de azúcar
   4 yemas
   150 g de harina de repostería
   50 g de cacao
   1 sobre de levadura Royal
   una pizca de sal
   media vaina de vainilla

Precalentar el horno a 180ºC.
Cortar la vainilla longitudinalmente para raspar las semillas.
Mezclar la mantequilla, el azúcar, la sal y las semillas de la vainilla hasta que todo esté cremoso y bien integrado.
Añadir las yemas y seguir mezclando.
Incorporar el cacao, la harina y la levadura.
Hacer montoncitos en una bandeja de horno y aplastarlos un poco, o bien poner la masa en moldecitos para que salgan como los de la foto.
Hornear unos 10-12 minutos.

Una vez fríos se hundirán un poco en el centro (tienen que ser así, no penséis que os han salido mal) y eso lo podéis rellenar con lo que queráis.
Estos los he rellenado con una salsa de yogur y de toffe.

 

Están increíblemente buenos.

 

El que viene ahora es de praliné.

 

¿A que así da gusto tomar café después de comer?

Espero que os animéis a hacerlos :)







  

Siguen aquí...

 

Como todavía seguimos con las comuniones aquí va otra.

 



 

Esta vez ha sido una comunión doble.

Dos hermanas muy, muy especiales para mí (A. y N.) :P

No hubo dudas en cuanto a la decoración de la tarta. La madre de las susodichas la vio en esta página y me la enseñó. A mí también me gustó mucho y no quisimos cambiarle nada; además, siendo rosa y de corazones, las hermanas quedaron encantadas (sobretodo la mayor de las dos).

 

Y por supuesto, fue de chocolate y praliné de avellanas, que así es éxito seguro para el resto de invitados.

 

Espero que os guste.







Ya están aquí...

No, no penséis en poltergeist.
Ya están aquí... las comuniones.

 

Esta tarta es de dos pisos diferentes.
El de arriba es de bizcocho de caramelo con muselina de praliné.
El de abajo es de bizcocho de chocolate negro con crema  de chocolate.

 

Quedó muy primaveral y muy infantil.
La muñeca era la propia para la tarta ¿verdad? Aunque desde aquí quisiera hacer un llamamiento a los fabricantes de muñecos para tartas de comunión:
- por favor, ¿podrían hacer los pies con un poco más de base? más que nada es para que no se caigan de la tarta...(algo importante y a tener en cuenta) y no tener que hacer apaños en plan "cosa nostra".

 



Aquí tenemos un "momento mafia" con los pies hundidos en cemen.. digo en azúcar.

En fin, que quedó muy bien y muy buena.
Espero que os haya gustado.





Pan cateto

 

Hoy vamos a hacer un pan cateto. Pero sin complicarnos demasiado la vida (hombre un poquito sí, pero muy poquito ¿vale?).

La verdad es que hay un montón de libros y sitios en internet donde explican estupendamente cómo hacer pan, cómo hacer una buena masa madre, qué utensilios tener para hornear bien las hogazas, ...

Pues bien, este pan se puede hacer con lo que normalmente tenemos a mano en la cocina, y la verdad es que está muy, muy bueno; con su corteza seca y lisa, su miga apretada, su olorcito un poco ácido...

No me enrollo más y vamos con la receta.

Croissant preñao

¿Croissant preñao?
¿Y eso qué es?



Bueno, me explicaré...
En Asturias tienen el bollo preñao (bollu preñau que dirían ellos, supongo) que no es más (bueno lo de "que no es más" es una forma de hablar, porque están de vicio) que un bollo de pan relleno de chorizo con un toquecito ahumado que te mueres de lo rico que está.
En fin, que estaba yo haciendo masa para unos croissants y napolitanas...

 



Y empecé a divagar...

 

Y empecé a hacer bolas...

 

Rellenas de ese chorizo asturiano...

 

Así que aquí están los croissants preñaos.
Un bocadito buenísimo.









Un guiño a Viena

Me encanta la tarta Sacher.
No puedo evitarlo.
Bizcocho de chocolate (y no cualquier chocolate, me gusta con un 70% de pasta de cacao), mermelada de albaricoque y un glaseado de chocolate (del de antes...) con mantequilla.
Se me está haciendo la boca agua mientras estoy escribiendo esto.

Pues sí. Magdalenas Sacher.
Igual de buenas que la tarta.

Y para el que no quiera tomar una entera también está la versión "mini".

Pues sí.
Igual de buenas que las más grandes o la tarta (y también con su mermelada).
Espero que os haya gustado.