¿Y eso qué es?
Pues es una masa sable (quebrada) pero un poco más esponjosa, sin dejar de ser una galleta.
Como está muy bueno y es muy fácil de hacer os pongo la receta.
Ingredientes:
150 g de mantequilla a temperatura ambiente
150 g de azúcar
4 yemas
150 g de harina de repostería
50 g de cacao
1 sobre de levadura Royal
una pizca de sal
media vaina de vainilla
Precalentar el horno a 180ºC.
Cortar la vainilla longitudinalmente para raspar las semillas.
Mezclar la mantequilla, el azúcar, la sal y las semillas de la vainilla hasta que todo esté cremoso y bien integrado.
Añadir las yemas y seguir mezclando.
Incorporar el cacao, la harina y la levadura.
Hacer montoncitos en una bandeja de horno y aplastarlos un poco, o bien poner la masa en moldecitos para que salgan como los de la foto.
Hornear unos 10-12 minutos.
Una vez fríos se hundirán un poco en el centro (tienen que ser así, no penséis que os han salido mal) y eso lo podéis rellenar con lo que queráis.
Estos los he rellenado con una salsa de yogur y de toffe.
Están increíblemente buenos.
El que viene ahora es de praliné.
¿A que así da gusto tomar café después de comer?
Espero que os animéis a hacerlos :)